Corrían 65′ del encuentro entre Everton y Cobreloa cuando se produjo un hecho inédito en el fútbol chileno. Y es que resulta que desde la hinchada loína no encontraron nada mejor que lanzar un escobillón al campo de juego cuando el volante oro y cielo Sebastián González se alistaba para efectuar un tiro de esquina cerca de la Galería Laguna, lugar donde se instaló la parcialidad visitante.
Si bien el objeto estuvo lejos de llegarle al jugador, lo sorprendente e insólito es que los fanáticos del cuadro minero hayan encontrado dicho útil de aseo para luego tirarlo a la cancha con la intención de agredir a un futbolista del cuadro viñamarino.
Un incidente menor y casi insignificante si se toma en cuenta la verdadera batalla campal que se produjo el pasado 12 de julio poco antes que se jugara el Clásico Porteño, cuando varios hinchas de Everton y Santiago Wanderers ingresaron al terreno de juego para enfrentarse a golpes, e incluso utilizando palos y estoques.
Eduardo Acuña, jefe de seguridad de Everton, se mostró sorprendido por el hecho, ya que tanto personal del club como de Carabineros revisan con antelación el recinto deportivo para que justamente no sucedan hechos de este tipo.
“Vamos a tener que chequear ese tema porque nosotros como club hacemos revisión del estadio, al igual que Carabineros, pero en algún minuto tiene que haber quedado el escobillón. Ese es un tema que hay que evaluar, vamos a tener que revisar las grabaciones minuto a minuto, desde el ingreso del público visitante para determinar de dónde salió el escobillón”, explicó Acuña.
De todas formas, el funcionario oro y cielo aclaró que el sujeto -un adulto cuyo domicilio está en Santiago-fue detenido por Carabineros en las afueras del estadio Sausalito, algo que se hizo para evitar tener mayores problemas con la hinchada de Cobreloa al momento de la captura.
Con respecto a la manera en que lograron identificar a la persona, Acuña reconoció que fue gracias a la utilización de las cámaras de televigilancia que posee el coliseo viñamarino, y aseguró que “captamos la imagen precisa cuando fue lanzado el escobillón y luego hicimos el seguimiento del sujeto y su comportamiento al interior del estadio, desde que se subió y bajó de la reja, hasta el cambio de vestimenta para no ser identificado. Luego coordinamos conjuntamente con Carabineros, que nos ayudó a detener a esta persona una vez finalizado el encuentro”.
Para poder identificar a individuos problemáticos, Acuña fue enfático en señalar que “estamos minuto a minuto monitoreando a través del sistema de cámaras, que permite en cualquier momento identificar y poder sacar fotografías de los hechos y de las personas”.
Fuente: El Mercurio de Valparaíso.
Fotografía: Agencia Uno.