El “clásico porteño” quedó en manos de Everton, ya que el conjunto de Viña del Mar venció por 3-1 en calidad de forastero a Santiago Wanderers, en un duelo que se jugó sin público visitante. Los dirigidos por Víctor Rivero tuvieron un sólido desempeño y se quedaron con el triunfo ante su más tradicional rival.
Los “ruleteros” golpearon primero en el partido, luego de una jugada que definió Jorge Gálvez cuando se jugaban los siete minutos del primer tiempo. Los porteños tuvieron la ocasión de igualar las acciones mediante lanzamiento penal, pero el tiro de Carlos Muñoz fue deficiente y el portero Gustavo Dalsasso sacó el balón con su pie.
Ya avanzado el segundo tiempo, cuando se jugaban los 68′, Fernando Saavedra aprovechó un balón suelto dentro del área tras un córner, y remató de zurda para vencer al portero rival. Dentro de la jugada hubo un penal, pero el árbitro Enrique Osses aplicó bien la ley de la ventaja, dejando seguir la jugada.
Los visitantes estiraron las cifras el 71′, en un contragolpe mortal que Saavedra finiquitó con un precioso “globito” por encima de Viana, quien nada pudo hacer ante la buena definición del viñamarino.
Los “caturros” llegaron al descuento a través de su capitán, Jorge Ormeño, quien con un potente remate desde 35 metros clavó la pelota en el arco rival, decretando el tres a uno que terminó siendo definitivo.
De esta forma, Everton llegó a cuatro puntos en el grupo 3 y está momentáneamente en el segundo puesto a la espera de lo que realicen los otros integrantes de su serie. En la siguiente jornada, los de la Ciudad Jardín recibirán a Unión La Calera en el estadio Sausalito.
Fuente: El Gráfico