De todos los jugadores de Everton que festejaron la obtención de la postemporada -tras superar a La Serena el sábado- hubo uno que se mantuvo al margen. Y es que a decir verdad, no estaba para festejos. Fernando Saavedra se había visto involucrado en una desafortunada acción que terminó con su compañero de profesión, Jovany Campusano, con una doble fractura en su pierna derecha.
El volante viñamarino -que esa misma noche se trasladó junto a Camilo Rozas y al presidente evertoniano, Antonio Bloise, para visitar al jugador serenense en la Clínica Valparaíso- se mostró muy afectado por lo sucedido, ya que jamás pensó en dañar o lesionar al rival.
“No ha sido fácil, recuerdo que fue una pelota divida al medio, yo me estiro, golpeo la pelota y de ahí pasé a llevar al jugador. Incluso iba con las piernas flectadas, fue una desgracia… una jugada de fútbol”.
-No, nada de eso, si fue más que nada fue un choque muy fuerte que también me tiene afectado, ya que fue un golpe fuerte y también tengo que hacerme una radiografía para ver que tengo.
-Bajoneado, ya que no es grato pasar por esto. Yo al principio no pensé que era tan grave, pero después veo que los rivales se me tiran encima a reclamar y de ahí el árbitro (Enrique Osses) me dijo que no te puedo dejar en la cancha.
-Traté de hacerlo, pero estaban todos muy calientes por la situación. Yo les expliqué que no hubo mala intención, nunca he sido un jugador que quiera ir y dañar a un rival… no soy así”.
-Acabó de verlo en la clínica, ya que lo operan esta noche (ayer). El sábado también fuimos, pero no pude verlo ya que estaba en reposo. Ahora hablé con él, conversamos un rato y el me dijo que me entendía, que son cosas del fútbol, que esté tranquilo y se lo agradezco”.
Fuente: La Estrella de Valparaíso
Foto: Emol.com