A todas luces, no ha sido un comienzo de temporada tranquilo para Everton. Si bien en el marco de la pretemporada y por Copa Chile el cuadro oro y cielo logró cosechar buenos resultados y mostrar un juego que a ratos ilusionaba a sus hinchas, aquel rendimiento no ha podido visualizarse en el inicio del Torneo de Apertura.
Transcurridas tres fechas del certamen, el elenco viñamarino sigue sin poder festejar una victoria, mostrando un desempeño muy alejado de las expectativas y que lo tiene en la parte baja de la tabla de posiciones con apenas dos puntos. Pese a que en los últimos dos partidos el equipo se vio mejor, los errores defensivos le siguen pasando factura a los dirigidos por Héctor Tapia.
Como si eso fuera poco, en medio de ese dubitativo inicio de campeonato, la tarde del lunes un grupo de cerca de diez hinchas -la mayoría de ellos jóvenes- acudió al Centro Deportivo Everton (CDE) en Reñaca Alto con el objetivo de presionar al plantel debido a los malos resultados, aunque también habría otros intereses de por medio, como exigir apoyo económico de la actual dirigencia y hacerse notar frente a los regentes del Grupo Pachuca.
Además, los barristas se encargaron de dejar un mensaje claro tanto para el plantel como para la dirigencia. “Mucha plata pocos huevo”, rezaba un rayado realizado en el muro del CDE.
Pese a que durante una actividad realizada en el recinto oro y cielo en la mañana de ayer -ver recuadro- el presidente de Everton, Pedro Cedillo, evitó referirse a la presión realizada por un grupo de fanáticos, sí accedió a entregar su opinión en horas de la tarde.
Al respecto, el joven timonel mexicano afirmó en forma categórica que “nuestra postura frente a los hechos de violencia es clara. No aceptamos este tipo de prácticas en nuestra institución. Si bien lo que ocurrió el lunes fue un hecho aislado y sin mayor relevancia, nosotros no aceptamos este tipo de actitudes, ni menos contra nuestros jugadores. En Everton hay cabida al hincha que va domingo a domingo al estadio, tal como aquel que critica con justicia, pero no hay cabida alguna a la violencia”.
Consultados por el incidente, tanto Marcos Velásquez como Cristián Suárez intentaron bajarle el perfil, aunque se mostraron conscientes de la molestia que pueden tener los hinchas debido a que los resultados no han sido los esperados.
“Conozco a varios hinchas, gente referente de la barra, y para mí es como que te griten cosas en la calle, pero no pasó a mayores y sacamos la cosa adelante y pudieron salir del complejo”, manifestó el capitán auriazul, agregando que “obvio que entiendo la molestia, nosotros entrenamos para ganar y darles una alegría, pero esto es fútbol, se gana, se empata y se pierde. Hemos estado al debe, pero hemos mejorado mucho en el último partido y esperamos este viernes darle una alegría a nuestra gente”.
En tanto, Suárez expresó que “la gente se puede manifestar de cualquiera forma, creo que lo primordial es que nosotros tratemos de mantener la tranquilidad. Sabemos que la gente está molesta por la situación en que nos encontramos porque también se crearon muchas expectativas… pero nosotros estamos convencidos con el trabajo que se está haciendo con Héctor (Tapia) y todo su cuerpo técnico”.
De todas formas, el defensor se mostró confiado en revertir el complejo escenario. “Como jugadores estamos dolidos por la situación, pero sabiendo que tenemos un lindo partido a la vuelta de la esquina y donde será importante el apoyo de toda la gente, esperamos que puedan estar allá para todos juntos salir adelante de este momento”, sostuvo Suárez, esperanzado de que el choque del viernes ante Unión Española en Sausalito sea un punto de inflexión en este complicado arranque de torneo.
El Mercurio de Valparaíso