El argentino Rafael Armando Viotti, que ya lleva seis conquistas en el actual torneo, recordó así su golazo del minuto 80 ante los loínos. “Fue una pelota en profundidad en donde le gano de cabeza a uno de los centrales, me quedó el balón para adelante, veo que el otro central iba mucho más rápido que yo, lo traté de esperar un poco para ver si me tocaba y me hacía penal. La cosa es que pasó de largo, la pelota siguió ahí y pegarle de taco era el único recurso que me quedaba. Gracias a Dios salió un lindo gol, pero insisto en que más allá del gol, lo que más me pone contento es la actuación del equipo en general, ya que los objetivos grandes los ganan los equipos y nos las figuras individuales”.
En relación a los 180 minutos jugados y en donde Everton clasificó con “canasta limpia”, ganando allá y acá, el ex ariete de San Luis de Quillota agregó que “sabíamos que de los cuatro equipos que clasificamos a la liguilla, Cobreloa iba a ser uno de los más difíciles y en especial por la altura, porque ellos se hacen fuerte en esa cancha y uno no está acostumbrado a jugar con ese calor. Hicimos un partido inteligente y nos trajimos un triunfo que quizás fue mucho para nosotros, pero que al final nos sirvió para plantear otro partido en casa y ganarlo de esta manera.
-Esa fue la idea. Cobreloa tenía que dar vuelta la llave y al intentarlo nos iban a dejar más espacios. Se hizo lo planificado, hicimos un partido inteligente y ahora nos queda el último paso en este primer semestre.
¿MALHUMORADO?
-A ratos da la impresión de que usted no lo pasa tan bien en la cancha, ya que discute bastante y por ahí tuvo varios encontrones con el juez Ulloa…
-Son cosas que quedan en la cancha. Yo reconozco que a veces soy muy temperamental y que me sacan de quicio muchas cosas. Pero uno es humano, comete errores… es algo que tengo que mejorar. Se que a veces soy muy compulsivo, pero jamás voy con mala intención, ni nada, sino que es esa mi forma de jugar”.
-Me da lo mismo, ya que si uno quiere quedarse con el objetivo… hay que ganarle a cualquiera. A lo mejor nos convendría jugar una final en casa con La Serena, pero te insisto, los dos son grandes rivales, hay que esperar con tranquilidad y no relajarse, ya que con trabajo y siendo humildes… las cosas siempre llegan”.
Fuente: La Estrella de Valparaíso.
Foto: Everton.