Everton vuelve a los abrazos en Sausalito

En un apretado partido disputado en el estadio Sausalito, Everton venció 1-0 a Unión San Felipe en el duelo que cerró la octava fecha de Primera B. Un resultado que dejó a los oro y cielo en una expectante quinta posición, cuando todavía les resta jugar el encuentro pendiente con Coquimbo Unido.

A diferencia de los otros compromisos que los viñamarinos disputaron en casa, en esta oportunidad se vio a un equipo poco aceitado y que quedó al debe en cuanto a su rendimiento, sobre todo en la faena ofensiva. El escaso ritmo de competencia debido a más de tres semanas sin jugar un partido oficial se notó demasiado en los dirigidos por Víctor Rivero.

En un arranque parejo y sin un claro dominador, con muchas imprecisiones y pierna fuerte en el mediocampo, Everton encontró el gol a los 16′. Un tiro libre frontal servido por Ragusa fue bajado por Concistre en el área para sacar un remate cruzado y poner el 1-0.

La apertura de la cuenta llegó en un momento preciso, justo cuando al cuadro auriazul le costaba hacer su clásico juego asociado abriendo la cancha y carecía de profundidad para provocar daño. Salvo un remate de Ponce, ninguno de los dos equipos creó mucho peligro en el arco rival.

Para cambiar el panorama, al inicio del segundo tiempo Rivero ordenó el ingreso de Carrasco y Peñailillo, quienes por venir recuperándose de sus lesiones comenzaron en el banco. La falta de roce competitivo también se notó en estos jugadores y lo cierto es que fue la visita la que generó más peligro, con un palo incluido y obligando la respuesta de Claudio González en al menos dos ocasiones.

Recién a partir de los 70′ Everton comenzó a manejar las acciones y tuvo varias opciones para marcar el segundo gol, pero ni Viotti, Saavedra o Concistre pudieron definir. Pese a su imprecisión, el local se quedó con una victoria que le permite instalarse en la parte alta de la tabla previo al choque de este sábado contra Deportes Concepción en Sausalito.