A fines de octubre de 2014, Carlos Medina dejó su cargo de gerente técnico de Everton para asumir la banca oro y cielo luego del despido de Luis Marcoleta, un experimentado entrenador que alcanzó a dirigir apenas 11 partidos sin cumplir con las expectativas de la dirigencia y de la hinchada viñamarina. En su debut como técnico del primer equipo, que al mismo tiempo significó su primera gran experiencia como DT, Medina dirigió 27 partidos, cosechando 13 triunfos, 6 empates y 8 derrotas, resultados que dejaron a Everton en el tercer puesto del certamen.
Tras el término del torneo de Primera B, hoy en día Carlos Medina aprovecha de disfrutar de sus vacaciones junto a su familia, un aspecto que quizás poco pudo hacer durante el último tiempo. Pese al relajo que suponen los días libres, el técnico viñamarino durante la campaña pasada reconoce que se siente intranquilo con respecto a su futuro.
Su contrato como DT oro y cielo concluyó tras el duelo de la última fecha ante Deportes Temuco en Quillota. Pese a que sabe que es compleja su continuidad en la banca auriazul, el oriundo del cerro Esperanza de Valparaíso confiesa que le encantaría seguir en un club que considera como su casa. Por eso mantiene intacta la esperanza de poder armar un plantel de acuerdo a sus necesidades y a su forma de ver el fútbol, algo que no pudo hacer en el campeonato pasado.
- ¿Cómo ve la posibilidad de continuar?
- Algo hablé con Carlos Oliver (gerente general del club) y me dijo que se terminó mi contrato después del último partido. Pero para mí es un tema complicado, porque yo previamente tenía contrato indefinido con Everton como gerente técnico, así que es medio raro. Pero se ve complicada mi permanencia en Everton.
- ¿Le gustaría volver al cargo de gerente técnico?
- En este momento, Carlos Oliver me dijo que no había ninguna posibilidad de que yo volviera al cargo anterior, porque yo seguí la línea de ser entrenador. La verdad es que no sé qué va a pasar. Hoy, como está detenido el tema, no hay nada claro.
- ¿Le dijeron sobre alguna fecha en la que se sabrá si es que sigue como entrenador?
- Seguramente después de la inauguración del estadio (programada para el miércoles 3 de junio) se definirá eso.
- ¿Está buscando otros clubes para dirigir y seguir su carrera como DT?
- La verdad es que no he visto nada todavía. Me llamaron de algunas partes, pero nada claro. A mí me gustaría seguir en Everton, esa es la verdad, pero hasta el momento no ha pasado nada. Voy a esperar unas dos semanas más, y si no hay ninguna respuesta desde Everton, buscaré nuevos horizontes.
- ¿No le parece un poco tarde que Everton recién empiece en junio a definir su plantel para la próxima temporada?
- Es muy tarde. Esto debió haberse definido mucho antes, incluso antes que finalizara el campeonato ya deberían haber estado buscando los jugadores adecuados para enfrentar la próxima temporada. Ya se fue Francisco Silva y Jorge Deschamps, y seguramente Juan Grabowski va a tener ofertas, al igual que Cristián Canío. Se están yendo los jugadores que podrían quedarse e ir sumando minutos para la campaña que viene.
- ¿Cómo se ve el panorama para la próxima temporada?
- Se ve complejo el panorama de Everton, porque otros clubes ya se están armando. Por ejemplo, Cobreloa tiene jugadores del torneo pasado que tienen contrato y que son mucho más fuertes que los nuestros. Curicó ya se armó, y Ñublense tiene jugadores de Primera que van a dar la pelea para volver a ascender. Hay varios equipos que van a hacer muy difícil el torneo, si Everton no se arma luego como corresponde, con gente de Primera B y jugadores idóneos para cada puesto, se va a complicar de nuevo y va a ser más difícil.
- Va a estar complicada la Primera B con el descenso de equipos importantes para la categoría.
- Por supuesto que va a ser complejo. Barnechea, San Felipe, Rangers, Cobreloa y Ñublense son equipos fuertes y van a estar en la pelea. Ellos ya se están armando, y si nosotros no lo hacemos pronto, se nos va a complicar.
- ¿Quedó conforme con su primera experiencia?
- Sí, por supuesto. Hicimos hartas cosas buenas que la gente quizá no lo apreció bien. Le dimos muchos minutos a futbolistas jóvenes. Tuvimos varios partidos de local buenos, creo que solamente perdimos dos en todo el campeonato desde que estuve yo. Pero lo que pasó fue que San Luis se escapó como nunca antes se había visto en el torneo. En un torneo normal, con los puntos que sacamos (62 unidades) peleábamos arriba. Nuestro torneo no fue malo. Si pudiéramos ser más consecuentes en la utilización de la gente joven, andaríamos mejor.
- ¿Hay que darle más opción a los jugadores formados en casa?
- Sí, por supuesto. Nosotros hicimos un análisis de todos los partidos, y la mayoría de los compromisos que ganamos, cerca de un 95% jugamos con cinco o seis jugadores de casa, lo que habla bien de lo que se está haciendo en Everton.
- ¿Cree que no rindieron bien los jugadores que vinieron a reforzar al equipo?
- No sé si no rindieron, pero a los mejor teníamos muchos jugadores grandes que no llevan a cabo lo que sí hacen los jugadores jóvenes, que es correr y luchar cada pelota, además de ese hambre que suelen tener los juveniles. Claro que también hubo bajos rendimientos individuales, y eso fue en todo el plantel. Primera B es de correr y meter, así es el tema, y como decían por ahí, el que no corre no juega, y eso es lo que terminó pasando.
Fuente: El Mercurio de Valparaíso.